El camino a casa............

Siempre me pongo hasta arriba de cerveza,
vuelvo a casa escuchando música,
de noche, cuando mejora la acústica,
en las paredes de mi cabeza.

Me paro porque algo me ha tocado el hombro,
que susto, son las luces de los semáforos en rojo,
parece que la ciudad arde en llamas,
están ebrias las calles,
mañana habrá aceras con resaca,
y asfalto con antojos,
pues hicieron el amor los coches,
con el resplandor de sus focos.

El camino a casa,
después de unas jarras o de unas tapas,
de pensar si fueron risas de complicidad o si fueron falsas,
si ganará este año la liga el Madrid, o si lo hará el Barça.

Me dan ganas de escribir cuando vuelvo de noche,
mi mente prefiere volver caminando, pasa del coche,
cruzar el puente como un verso libre,
cuando te preocupas mentirte,
pensando que el que escribe se siente perdido como una bala,
que vuela libre,
pero que no sabe dispararla,
porque piensa que es de otro calibre.

Y fíjate de lo que escribo después de un Martes,
quedando aún tres días para darle actualidad a esta escritura,
unas risas, comida, unas jarras, la garganta rota,
se repite como el sufrimiento mundial del telediario,
algunos borrachos de ron como corsarios,
sean bienvenidos al día de la marmota!.

Vuelvo a casa de madrugada con los clásicos en mis cascos,
me dan envidia su voz y sobre todo su talento,
parecen estar conmigo de verdad, hasta escucho sus pasos,
entran en mis oídos sus claves de sol,
y me quitan frío mientras sopla el viento.

Soy ese monje que diseña sus sueños de madrugada,
cuando las churrerías abren sus puertas,
y la lluvia cae muerta,
a los brazos de la calzada.