martes, 19 de junio de 2018

Futuro libro?.........

-No sabía si llegarías, menos mal, estas aquí. ¿Donde te habías metido? Me tenías preocupada, llevo mucho tiempo esperándote, buscando y buscando pero nada no te encontraba, dime....¿donde has estado?


Buscándote, en otros labios que no saben lo que saben los tuyos,
buscándote en otras mentes, en otra música, en otras cinturas,
buscando tu luz, a pesar de haberme dejado a oscuras,
buscándote, fuera de la ciudad, y su murmullo,



-Yo también te busqué en otros lugares, en otras personas, pero no te encontraba, y ahora que te encuentro no se que decir, que hacer, ni que pensar. Estoy feliz y triste a la vez. Triste porque aun tengo el miedo de que no llegaras, y feliz porque estas aquí. Tengo un cóctel de pensamientos, estoy preocupada porque no se si eres lo que esperabas, si todo habrá valido la pena.....si el tiempo nos dará la razón, o nos arrastrará el viento arrastra los granos de arena de la playa. ¿Que dice tu silencio?


Tengo tristeza, 
y a la par alegría, 
mucho tiempo tu imagen en mi cabeza,
ahora reflejada en mis ojos......eso era lo que quería.

Siempre estuve buscando prosas,
en otras mujeres, en otros besos,
pero tenía siempre tus mariposas,
revoloteando por mis versos.

Tengo algo que confesarte,
o eso me temo,
aunque me veas así, romántico y galante,
estoy enfermo.



-¿Que te pasa? ¿Has enfermado? Buscaremos al alguien que te arregle, no te preocupes, ninguna enfermedad va a hacer que nos separemos, nos queda mucha tinta que gastar juntos, este no será nuestro fin....

Desde que te ví allí vestida de blanco,
en aquella tienda, y yo con mis pintas,
no puedo hablar, me atranco,
y no paro de sudar tinta.

A veces me dejas a cuadros,
otras veces me mantuviste a rayas,
pero cuando te tengo entre mis manos,
ya me sobran las palabras.

No se si enfermé en la cuna, 
si podré superarlo algún día,
pero mi enfermedad es hablarle a la luna,
y a tí hablarte en poesía.




-Me estás diciendo.....¿que solamente puedes hablar conmigo en poesía? El camino debió de ser muy largo, porque creo que has perdido la cabeza un poco, no me mientas, y deja de tenerme en ascuas, dime de verdad que te ha pasado, ¿porque estas tan enfermo?

Suena extraño como si me hubiese dado un golpe,
pero mi enfermedad es hablar en poesía aunque no lo creas,
solo puedo hablarte como hablaba a Dulcinea,
el caballero don Quijote.

Mi enfermedad puede resultar tediosa, 
no se aún pero solo me pasa contigo,
si quieres dejarme y pasar a otra cosa,
hazlo, pero no me pidas que sea tu amigo.



-Si lo he entendido bien, ¿tu enfermedad consiste en hablar conmigo solo en verso? Tendré que acostumbrarme a ello, pero quiero escribir folios en blanco contigo, no importa el orden de tus palabras.

Algún día descubriré el causante de mi mal de ojo,
que me hace hablar en prosa, y otras veces en verso,
ahora solo quiero recibir tus besos,
y tu cara reflejada en mis ojos.