jueves, 24 de octubre de 2013

UNA REALIDAD QUE SUPERÓ MI FICCIÓN




Escucho a los M-Clan y no me olvido,
y es que son muchas las razones,
de que confundo lo vivido,
con su libreto de canciones.

Si después de lo nuestro, me siento desenchufado,
si tengo en común algo con el vocalista,
alguno pensará que es el pelo rizado,
cuando lo que salta a simple vista,
que su chaleco y mi alma están rallados.

¿Como no me vas a recordar a los M-Clan?,
si besabas y me sacabas de la guerra,
me sentía en una nave espacial,
que no quería llamar a la tierra.

Mi regalo de otro país,
despiertame Maggie, pellízcame el brazo,
alguien me ha dejado un souvenir,
con una sonrisa de lazo.

Y un día voló por la ventana,
sin dejarme un beso o una caricia,
y lo peor es que fue leyendo el periódico de mañana,
donde me enteré de la noticia.

Cariño, no es amor lo que siento,
un dia me quise quedar a dormir,
y fue ahí cuando entendí,
que éste quizás no era un buen momento.

No se que está pasando, me quedé inherte,
no se si os ha ocurrido,
pero que te respondan "no quiero verte",
cuando pides un "vuelve" es bastante jodido.

Contigo me sentía como el Avecrem,
me cueces y me enriqueces,
y ahora veo todo de negro tantas veces,
que me vino la superstition un martes trece.

Y vestido de traje,
estoy enfrente del peaje,
viendo en mi cabeza los recuerdos que tuvimos,
ahora me dejaste sin equipaje,
subiendo al tren que nunca cogimos.

No se llamaba Carolina esa dama,
que mi borrachera acaba de recordar,
mi presencia fue de usar y tirar,
perdí la calma esta noche en la barra del bar.

Allí donde el río hierve,
perdí mis cartas en esta timba,
me despistó el olor de la cachimba,
pero con el humo calmo la ansiedad,
del que se siente perdido en la ciudad.




martes, 22 de octubre de 2013

DESASTRE-BURGO

Estrasburgo, ese lugar de cuyo nombre no quiero acordarme,
alli donde nace las lágrimas de mujeres y hombres,
ese es el sitio donde volvimos a ser condenados sin ya ser mortales,
no bastaba con el hijo de puta que provocó nuestras penas capitales,
ahora tenemos que ver desde nuestra sucursal del cielo en Alcasser,
como mueren en vida el alma de nuestros padres.

Nosotras también llegamos a nuestros terminales,
nos quitaron el alma sin tocar órganos vitales,
tocaron nuestra decencia una y otra vez con sus genitales,
convirtieron en espinas todos nuestros rosales.

Me llora el espíritu ver esta humillación,
su condena quedará en vano,
pues ahora como yo, habrá quien sufra una violación,
y serán los derechos humanos.

Que mal me siento, que frustración,
algún día todo tornará en vendetta,
para aquel que explotó una furgoneta,
destruyendo la calma de una nación.

Diecisiete han sido los iluminados,
que han puesto a la justicia en la balanza,
a aquellos que con odio y venganza,
contra la democracia han atentado.

Con las botas puestas quiero morir con arrogancia,
el último aliento para ver a mi verdugo,
que conste que soy la democracia,
aunque diecisiete balas me apunten desde Estrasburgo.